El amor... Algo tan complicado. Algo que no es inventado por nadie, que se siente o no se siente. Algo que puede surgir sin que se quiera, sin poder dominarlo. Hablo del amor en pareja. Difícil, susceptible a miles de factores y también maravilloso al mismo tiempo.
El otro día estaba leyendo una entrevista en Internet y me sorprendió encontrar este titular: “El amor es una necesidad fisiológica, un instinto animal, que dura entre 18 meses y tres años”. Esta frase tan interesante era citaba por la antropóloga Helen Fisher.
Y me dejó sorprendida y a la vez decepcionada. ¡Qué poco dura!
¿Y qué hacemos con eso del amor eterno? ¿Del amor cuando hasta que la muerte nos separe? ¿Ya sólo queda simple cariño? ¿Dependencia quizá?
¿Qué tristeza!
No quiero creer en ello. Aún confío en esa situación en la que las dos personas son ancianitas y se miran con ternura, se cogen de la mano... Aunque creo que poco realista. A esas edades muchos dicen que poco queda de lo que hubo. Y es una pena eso. Hay gente que hubiera dado todo por pasar un día más con el amor de su vida.
Pero es ley de vida. La llama se va apagando. Pero la vida en pareja continúa. La dependencia es cada vez mayor. Para muchos y muchas es imposible romper con ello.
Además en esta entrevista también salió el tema del amor a dos personas a la vez. Complicado como ya decíamos antes. ¿Se puede? Pues según ella sí. Ella afirma que puede existir una loca pasión hacia varias personas a la vez.
Entonces aquellos infieles.... Ya tienen excusa. Ya no se puede decir que es puro vicio, sino simplemente sentimientos que salen del interior e irremediables.
También habla de algo muy interesante. Fisher afirma que cada vez más, los hombres se enamoran del cerebro de las mujeres y no sólo de su físico. Es un paso importante. No sólo somos un cuerpo. Somos algo más que eso. Pero desgraciadamente muchos de los hombres de antes sólo querían a las mujeres para tener hijos y para limpiar. Menos mal que los tiempos cambian, y además en este ámbito para bien.
El otro día estaba leyendo una entrevista en Internet y me sorprendió encontrar este titular: “El amor es una necesidad fisiológica, un instinto animal, que dura entre 18 meses y tres años”. Esta frase tan interesante era citaba por la antropóloga Helen Fisher.
Y me dejó sorprendida y a la vez decepcionada. ¡Qué poco dura!
¿Y qué hacemos con eso del amor eterno? ¿Del amor cuando hasta que la muerte nos separe? ¿Ya sólo queda simple cariño? ¿Dependencia quizá?
¿Qué tristeza!
No quiero creer en ello. Aún confío en esa situación en la que las dos personas son ancianitas y se miran con ternura, se cogen de la mano... Aunque creo que poco realista. A esas edades muchos dicen que poco queda de lo que hubo. Y es una pena eso. Hay gente que hubiera dado todo por pasar un día más con el amor de su vida.
Pero es ley de vida. La llama se va apagando. Pero la vida en pareja continúa. La dependencia es cada vez mayor. Para muchos y muchas es imposible romper con ello.
Además en esta entrevista también salió el tema del amor a dos personas a la vez. Complicado como ya decíamos antes. ¿Se puede? Pues según ella sí. Ella afirma que puede existir una loca pasión hacia varias personas a la vez.
Entonces aquellos infieles.... Ya tienen excusa. Ya no se puede decir que es puro vicio, sino simplemente sentimientos que salen del interior e irremediables.
También habla de algo muy interesante. Fisher afirma que cada vez más, los hombres se enamoran del cerebro de las mujeres y no sólo de su físico. Es un paso importante. No sólo somos un cuerpo. Somos algo más que eso. Pero desgraciadamente muchos de los hombres de antes sólo querían a las mujeres para tener hijos y para limpiar. Menos mal que los tiempos cambian, y además en este ámbito para bien.
Os dejo un vídeo de la película "El Diario de Noa". Preciosa.
¿Enamorarte? Lo mejor que te puede pasar. Hay que probarlo.
Aunque sólo sea por 18 meses maravillosos
